Santiago do Cacém
El Alentejo portugués presenta paisajes fascinantes y pequeñas localidades donde encontrar paz y tranquilidad. Santiago do Cacém es uno de esos oasis rurales.
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Sobre Santiago do Cacém
Las huellas de su historia
Santiago do Cacém es una ciudad antigua. Su viejo castillo medieval da algunas pistas: fue construido por los musulmanes y cambió de manos varias veces.
Durante un tiempo fue de los Caballeros Templarios, hasta que Don Alfonso II lo conquistó definitivamente a principios del siglo XIII. Todavía más emocionantes que su pasado son sus vistas: desde sus torreones se obtiene una panorámica única de la ciudad.
Pero la historia de Santiago do Cacém no comienza con su castillo. Habitada desde los tiempos de los romanos, en su día fue una importante ciudad de paso entre Lisboa y el Algarve.
La influencia de este periodo se refleja en su Iglesia Matriz, de estilo gótico pero con toques romanos, y sobre todo, en las Ruinas Romanas de Miróbriga, al norte de la ciudad.
Paisajes tranquilos
Las casas blancas y las calles empedradas de Santiago do Cacém se sitúan en una colina rodeada del bello entorno del Alentejo litoral. Valles verdes y campos de olivo, el murmullo cercano del Atlántico y un ambiente imperturbable envuelven a esta pequeña localidad del sur de Portugal.
En los alrededores se pueden visitar otros paisajes, como los de la Reserva Natural de las Lagunas de Santo André y de la Sancha, situada entre Sines y Santiago y famosa entre los aficionados a la observación de aves.