Distrito de Oporto
No solo de vino vive Oporto, también de sierra, playas y rincones secretos en el norte de Portugal.
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Sobre Distrito de Oporto
Cruzando el Duero
La Ribeira, con sus casas de colores y terrazas asomando al Duero, es la imagen más famosa de Oporto. Entre sus paradas imprescindibles están la Capela das Almas, famosa por su fachada de azulejos, el Palacio de Bolsa y la Torre de los Clérigos, cuyos 200 escalones llevan a contemplar las mejores vistas de la ciudad.
Las famosas bodegas de Oporto no solo se reducen a la ciudad. Cruzando el Duero se llega hasta Vila Nova de Gaia, que además de coloridas casas y playas cuenta con algunas de las mejores bodegas de vino de la zona, que se pueden conocer en una visita y una cata. También en la ciudad, el Monasterio de la Sierra del Pilar ofrece estupendas vistas de la vecina Oporto.
El norte más verde
Hay muchas posibilidades de respirar aire puro en el Oporto, así como para probar el famoso “vinho verde” de la región.
Los amantes de la naturaleza encontrarán rutas por las sierras de Aboboreira y de Montedeiras y podrán practicar deportes náuticos en los pantanos de Marco de Canaveses, mientras que en Paredes son típicos el piragüismo, la escalada y el alpinismo. En Amarante esperan los paisajes de la Sierra de Marão y valle de Ansiães.
Los viajeros que también busquen playa pueden dirigirse a Póvoa de Varzim, un antiguo pueblo pesquero convertido hoy en importante centro turístico, y a Matosinhos, una aldea de pescadores tradicional donde se extraía sal. Actualmente, es el principal puerto pesquero del país.