Islas Canarias
Pueden presumir de tenerlo todo: playas de colores, volcanes, bosques milenarios, desiertos y ciudades cosmopolitas.
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Sobre Islas Canarias
Paisajes de otro mundo
La gran biodiversidad de las Islas Canarias es una de sus señas de identidad. Volcanes, playas de todos los colores (negras, amarillas y rojas), bosques tropicales, piscinas naturales y desiertos áridos poblados por cactus crean paisajes salidos de otro mundo.
Sus cuatro parques naturales albergan maravillas naturales como las Montañas de Fuego en Lanzarote un territorio volcánico que emula a Marte en la Tierra, los campos de lava negros en Lanzarote y Tenerife, las gigantescas dunas de la playa de Maspalomas en Las Palmas, o el milenario bosque de laurisilva en La Gomera. Todo esto cubierto por uno de los cielos menos contaminados del mundo.
En La Palma se encuentra Roque los Muchachos, el observatorio astrofísico más importante del hemisferio norte.
Las vacaciones (de invierno) perfectas
El clima subtropical mantiene a las islas Canarias todo el año con temperaturas medias en torno a los 20ºC. Una eterna primavera que convierte a este archipiélago español, situado frente a la costa noroeste de África, en una de las escapadas favoritas bajo el sol.
Los que vayan buscando olas y viento los encontrarán en Fuerteventura. Su playa de Sotavento junto con la localidad de Corralejo, son elegidas por surfistas de todo el mundo.
Mientras que la riqueza marina de las aguas que rodean las islas de El Hierro, La Palma y Lanzarote las han convertido en las favoritas para practicar submarinismo. Lejos del mar, las actividades de interior incluyen senderismo a través de espacios protegidos, como el Parque Nacional Caldera de Taburiente, en Lanzarote, y el Teide, en Tenerife, la montaña más alta de España con 3718 metros de altura. Las ciudades de Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife completan la oferta de actividades con museos, teatros y centros comerciales.